lunes, 2 de mayo de 2022

Los inicios de Muddy Waters

Pocos artistas tuvieron tanta influencia en el desarrollo del blues eléctrico y del rock 'n' roll como tuvo Muddy Waters. En esta entrada de Escuchate Esto! vamos a repasar algunos pasajes del ensayo “THE UNTOLD TRUTH OF MUDDY WATERS” de William Wrigth acerca de los inicios de McKinley Morganfield, desde los campos de algodón en Mississippi en los años 40 hasta su explosión como artista emblemático en la ciudad de Chicago.

Visto desde la perspectiva de hoy en día, lo que hizo a Muddy Waters diferenciarse y posicionarse como un artista rupturista, parece sencillo y previsible: adaptar su toque de country blues y delta blues a un instrumento amplificado con electricidad. Pero fue mucho mas que eso, fue empujar desde la guitarra eléctrica el nacimiento del blues urbano que nos llevaría directamente al desarrollo del rock 'n' roll en los '50. Y eso es mucho decir.

Tanto el año de su nacimiento (1913 o 1915) como el lugar preciso (Sharkey o Isaqueana, ambos en Mississippi) son motivo de debate. Gracias al libro "Can't Be Satisfied: The Life and Times of Muddy Waters", de Robert Gordon, sabemos que su padre, Ollie Morganfield, trabajaba con mulas pero también que era un músico talentoso. De su madre, Berta Grant, en cambio casi nada se sabe, solo que murió poco tiempo después del nacimiento de McKinley. El cuidado del niño quedó a cargo de su abuela, Della Grant. Al pequeño le encantaba chapotear y jugar en las oscuras aguas del delta, por lo cual se ganó pronto el apodo de “Muddy” (barroso o lodoso). Con 8 años y luego de solo 3 de educación formal, el pequeño Muddy tuvo que abandonar la escuela para trabajar en el campo y ayudar a mantener a su familia. 

Pero trabajar la tierra por aquellos años estaba apenas un escalón por encima de la esclavitud. A cambio de una pequeña parcela, un aparcero y su familia debían trabajar de sol a sol en los campos de algodón y el terrateniente se llevaba la mitad de la cosecha y deducía las semillas, herramientas, y el poco ganado que hubiera sido entregado, de lo que quedaba. Aunque el trabajo dominaba la vida de Muddy, su abuela se aseguraba que el niño asistiera a la iglesia cada domingo. Y allí fue donde descubrió el poder de la música.


En el libro "Deep Blues", Muddy le cuenta a su autor, Robert Palmer, que una vecina le dejaba escuchar música en su fonógrafo todo el tiempo. Expuesto a las grabaciones de Blind Lemon Jefferson, Tampa Red, y Memphis Minnie, Waters desarrolló un vocabulario musical basado en el blues y la iglesia. Al mismo tiempo, empezó a tomar contacto con instrumentos musicales de manera artesanal. Cualquier cosa que produjera sonido era un escape al trabajo del campo. A los 8 años, Muddy tuvo acceso a un acordeón, luego a una armónica, con la que acompañaba a un amigo guitarrista y a los 10 años, su abuela le regaló su propio fonógrafo. 

A los 14 tuvo su epifanía en el Blues cuando vió tocar en vivo a Son House en las afueras de Clarksdale. Las habilidades de House para tocar la guitarra slide, empujaron a Muddy a dejar de lado la armónica y pasarse a la guitarra. Luego de vender un caballo, repartió las ganancias con su abuela, se quedó con algo de dinero, y por 2 dólares con 50 centavos, compro su primera guitarra. Inmediatamente empezó a tocar todas las noches en los juke joints de Clarksdale y alrededores llegando a ganar hasta u$s 2.50 cada noche. Pronto cambió aquella primera guitarra por una de 14 dólares, un modelo del catálogo de las famosas tiendas “Sears, Roebuck & Co.”.

En el verano de 1941, Muddy Waters escuchó el rumor de que un hombre blanco lo estaba buscando. Alan Lomax, un musicológo de 26 años que trabajaba para la Biblioteca del Congreso, tenía la misión de documentar la música folk del Sur de los Estados Unidos. Lomax había escuchado que Waters era tan bueno como el fallecido bluesman Robert Johnson y quería grabar su música. Aún así, a Waters no le daba confianza el acercamiento de un hombre blanco. Para romper esa barrera de desconfianza, en el momento en que se conocieron, Lomax pidió al músico un poco de agua, y para su sorpresa, utilizó el mismo vaso del que Muddy había tomado. En el Sur segregado, un acto de esa naturaleza era inimaginable. Además de una entrevista, Lomax grabó dos canciones ese día: "Country Blues" y "I Be's Troubled". Muddy no solo se sorprendió al escuchar su voz en una grabación, sino que además, se dió cuenta que lo que hacía era tan bueno como cualquier otro disco que hubiera escuchado antes. Meses después, recibió un paquete por correo conteniendo dos discos y un cheque por 20 dolares. Así imaginó ese momento el director Darnell Martin en su film “Cadillac Records” (2008)



Pensando en ser alguien en el ambiente musical, Muddy dejó su pueblo, Stovall, Mississippi, y viajó a St. Louis, pero encontró la gran ciudad demasiado fría e impersonal. Volvió a Stovall para luego volver a irse, esta vez, a la ciudad de Chicago. Muddy Waters llegó a Chicago en 1943, con una maleta y una guitarra. Trabajaba como camionero durante el día y tocaba en fiestas y bares por las noches. Sin embargo, según le contó Muddy a Peter Guralnick en el libro "Feel Like going Home: Portraits in Blues and Rock 'n' Roll.", para dejar su marca en la gran ciudad, necesitaba ser oído en las calles, en los bares, en los nightclubs, y para eso necesitaba una guitarra eléctrica. Aunque T-Bone Walker venía usando un instrumento amplificado desde hacía algunos años, la diferencia fue que Muddy utilizaba un amplificador pequeño que sacaba un sonido roto, casi distorsionado. Los licks inspirados en Son House, transformaron el instrumento para siempre y le dieron una voz poderosa al blues de Chicago.

En 1946, su novedoso sonido llamó la atención de Columbia Records, para quienes grabó algunas canciones pero que nunca fueron editadas. Aquí es cuando su camino se cruzó con Lejzor y Fishel Chyzh. Estos dos hermanos polacos encontraron la veta de grabar musicos negros y se asociaron alm sello Aristocrat Records. A Leonard y Phillip Chess (así adaptaron sus nombres y apellido al idioma inglés) al principio les interesó grabar jazz, pero por alguna razón, esto no rindió sus frutos. Ellos podían entender el jazz, una música más universal tal vez, pero el blues rural era una música completamente extraña para ellos. Pero simplemente confiaron. Para 1950 siguieron creciendo y pudieron comprar el sello Aristocrat y lo renombraron "Chess Records" y claro, si hay que hablar de Chess, hay que hablar de Muddy. Pero esa, es otra historia. 


Fuentes:

https://www.grunge.com/405181/the-untold-truth-of-muddy-waters/
"Feel Like going Home: Portraits in Blues and Rock 'n' Roll" de Peter Guralnick
"Can't Be Satisfied: The Life and Times of Muddy Waters" de Robert Gordon, 
"Deep Blues", de Robert Palmer
Cadillac Records (2008), de Darnell Martin